Foto: La composición gráfica, encerrando, Gabriel Calle Aguas, entre misterios de “manos laboriosas”, de la campesina negra y el agricultor de mirada entristecida, simbolizan el conflicto agrario más de siglo. Permeando terrenos fértiles y humedecidos de la geografía departamental de Córdoba. En donde hoy son más de cinco siglos de terror, por las crueldades ibéricas. Desembocando también en el feudalismo criollo y la colonización antioqueña, por despojos de la “Tierra Profanada” y la influencia minera.
GABRIEL CALLE AGUAS: maneja una lingüística mezclada por varias épocas que, le hacen surtir de conocimientos y proyecciones contemporáneas su agenda programática, con fines de obtener resultados positivos de grandes auges en un posible cuatrienio de administración pública departamental.Procurando mostrar ciertas diferencias a eventuales antecesores durante la historia de 71 años cordobeses.
Su hoja de ruta programática argumentada en diversos ejes temáticos, el periodismo MILENIO, ha comenzado a desmenuzar, trayendo consigo en esta tercera entrega, el complejo fenómeno del “Conflicto Agrario” demás del siglo en el territorio seccional, concerniente a las últimas fases del espacio denominado “La Historia Doble del Sinú”, aunque, abarcando las cuencas Sinú- San Jorge y costanera; emparejadas con la Colonia y la Conquista ibérica.
Conflictividades de tierras, generadoras de inumerables “guerras” protagonizadas desde Alonso de Heredia, trasegando por los estados destructores y el capitalismo, hasta el presente año 2023, sin hallarse la primera solución. Problemática social que en los actuales momentos, causa una creciente “crisis alimentaria” sobre el 76,87% con tendencia a subir, consecuencias de los desmedidos últimos gobiernos nacionales y departamentales, en el sentido de “divorciarse” del campo.
Departamento de Córdoba, desde su delimitación geográfica, cuenta con 2’499.858 hectáreas. Porción territorial que sus auténticos dueños eran los aborígenes Zenú, ejemplos: Finzenú en la cuenca Rió Sinú –Costa y, Panzenú, cuenca San Jorge. Franja territorial, la misma que, hace 353 años, usufructuaran colonos traídos por Francisca Baptista, subdividida en “Caballerías”. Territoriedad llamada por sociólogos y antropólogos: TIERRA PROFANADA, dada pertenecer al aborigen desde la era amerindia.
De tal cantidad territorial cordobesa, el 50,3% equivalente al Millón 256 mil 894 hectáreas, aparecen de acuerdo con el Instituto Geográfico Agustín Codazzi – IGAC- focalizadas en la vocación agrícola. Entre tanto, 265.915 hectáreas aptas para la ganadería, sea el 10,6%. Teniéndose estudios geológicos de que, el 90% de los suelos cordobeses son fértiles a las labores agrícolas.
La propuesta oficial CALLE AGUAS, por estos siguientes cuatro años, es la obtención de 100 mil hectáreas, rebajando dicha cantidad del 50,6%, tan solo arrojaría el equivalente de 7,95%. Terreno que bien podría favorecer 250 mil hogares de familias, entre rurales, semirurales y suburbanos. Además poseedoras de sus titulaciones notariales, beneficiarias de créditos blandos a través del Banco Agrario. Programa de campaña que desembocaría hacia la Reforma Agraria Integral por la Paz del Departamento de Córdoba. Dada la misma dinámica del Gobierno Gustavo Petro, bordeado al territorio seccional.
Aunque, la problemática agraria, mayor del siglo departamental cordobesa, urge de acciones gubernamentales y estatales, para llegarse al tome dispuesto por el Gobierno del Cambio. Sobre todo, donarse un alto porcentaje de tierras (unas improductivas y otras en poder de grupos mafiosos). Encontrarse hoy en día, tan solo el 7,2% del 50,6% en calidad de labrado por el campesinado cordobés. Donde según fuentes DANE, la principal generación de la economía departamental proviene de la “ganadería y la minería”.
La propuesta Calle, es completamente saludable, en lo atinente al sector campesino, exclusivamente. De lógica, 100 mil hectáreas, para un mínimo de 250 mil familias cordobesas, a la vuelta de 2030, la estabilidad agrícola llegaría a tomes de “Economía Sostenible” introducida con rutas industriales; que completadas con la producción del maíz, el algodón, la yuca, el plátano, el ñame, el ajonjolí, el sorgo, incluso, el cacao.
Siendo fuentes para el arranque de “la Revolución Agraria”, tipo exportaciones. Engrosando mayores dividendos económicos en divisas al aumento de los “PIB”, sucesivos años 2040 y 2050, extendidos sobre hasta ahora, solo siete municipios, de forma pírrica. Entre ellos, Montería, Cereté, Montelíbano, Lorica, Sahagún, Planeta Rica, y Tierralta. Sobre una medida DANE, 2020, Departamento de Córdoba: 18.2 Billones de pesos. Del total 146 Billones del Caribe. Tras rezagos pos pandémicos.
(Pie de foto: La presencia de este campesino andando a lomo de burro, referencia el cruce de muchas familias atravesar potreros de hacendados cordobeses e interioranos, para llegar a sus destinos ancestrales).
En virtud el auge agrícola potencializado al 2030, de hecho el nivel de vida poblacional, escalaría a un estatus porcentual encomiable, elevando el crecimiento en “bienes económicos y rentas” por encima de 28,6 Billones de pesos “PIB”. No solo mantener el tercer lugar Caribe, sino, pelear el segundo de la región. Con posibilidades de copar hasta un mínimo capital rentístico de 250 mil millones de pesos; otros nuevos municipios: tales, “Valencia, San Pelayo, San Antero, Ciénaga de Oro y Puerto Libertador”. Acompañados al mismo tiempo con, procesos industrializados derivaciones de productos agrícolas, dando auge rentísticos de índoles socioeconómicos. Al valor agregado de los nuevos 2.500 kilómetros pavimentados de vías terciarias también incluidos en la agenda Gabriel Calle Aguas.
Toda una proyección visionaria departamental, se haría posible, sí el ciudadano votante del Departamento de Córdoba, decide apoyar el “único y confiable” proyecto político del candidato Gabriel Enrique Calle Aguas, eligiéndolo el domingo 29 de octubre, “primer gobernador” por el San Jorge.
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