Hasta las principales vías de acceso han sufrido los embates de las inundaciones
Jorge Rojas Rodríguez, periodista cordobés y ex secretario de Integración Social de la Colombia Humana de Petro, resume muy bien el empalme social en La Mojana (región donde confluye Antioquia, Córdoba, Sucre y Bolívar) ubicada sobre las cuencas de los ríos Magdalena, Cauca y San Jorge; según Rojas Rodríguez, este empalme, que se adelantó bajo el liderazgo del ingeniero Javier Pava Sánchez (@javier_pava_s) se sintetiza en: inundaciones, hambruna, corrupción, contaminación por minería, sedimentación, apropiación irregular de tierras, empobrecimiento en la región más rica del país, homicidios y amenazas a líderes campesinos.
Aunque el recorrido por la zona afectada de la Mojana solo se circunscribió a la parte más afectada, zona rural de Guaranda, Achí, San Marcos, Majagual, entre otras, se deja claro que las obras que adelantó el Gobierno Duque y las Administraciones territoriales, está inconcluso.
“Además de la suspensión de la obra en Caregato, que tiene inundada la Mojana, la Comuniad denuncia problemas en Puerto Pajón del municipio de Achi. El mismo contratista de Caregato es el ejecutor de la obra en el chorro El Cura, del municipio de Guaranda”, denuncia Javier Pava Sánchez
Alrededor de 140 familias afectadas viven en cambuches, como estos
Hoy en día, la Subregión de La Mojana sucreña, sus memorias, recrean la vida del campesino agropesquero, la que ha transcurrido en medio de una historia marcada por el surgimiento de organizaciones como la ANUC- línea Sincelejo y posteriormente la ANUC-UR.
Las afectaciones generadas por la sedimentación, contaminación y apropiación de ciénagas, de los caños y los playones, ha modificado el modo de vida anfibio que una vez caracterizó al campesinado de la zona. La minería que arrastra sedimentos y contamina, más el desecamiento de cuerpos de agua por parte de terratenientes (entre otros), son reconocidas como las principales causas de tal proceso.
“Hoy estamos realizando recorrido por la Mojana como parte del Empalme Social y territorial. Después de meses siguen inundadas viviendas en San Marcos Sucre mientras el contrato del Fondo Adaptación está suspendido, justificando la necesidad de la compra de predios”, apunta Javier Pava Sánchez
Precisamente, una de las familias encontradas en esta zona de afectación, expresa la larga espera, mientras denuncia que no han llegado las ayudas
Las familias no aguantan más el abandono del Estado
“Mientras familias pobres se concentran en los cambuches a la orilla de la vía y en playones o baldíos comunitarios, los grandes terratenientes aprovechan la oportunidad para acumular grandes extensiones de tierra. ¿Qué hay detrás de las inundaciones en la Mojana?”
La preocupación y el desespero por la eterna espera, queda bien reflejada en las palabras de Javier Pava Sánchez: “Desde octubre del año pasado realizaron el Censo de familias damnificadas por la inundación de Caregato y hoy siguen esperando las ayudas humanitarias. Denuncias de las comunidades de San Jacinto de Bolivar y veredas Pasifueres, El Cauchal y la Plaza de San Benito de Abad.”
Las comunidades se trasladan a los cascos urbanos para demandar ayudas.
Lo curioso es que mientras las mismas comunidades expresan que no han recibido ayuda o ésta ha sido parcial, el informe de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres –UNGRD, dice que ha entregado ayudas en cuatro ocasiones.
“Seguimos en el recorrido por el rio Cauca en la Mojana, visitamos las obras de la UNGRD en puerto Venecia en Achi y Bocas del Cura en Guaranda que adelanta en mismo contratista de la obra de Caregato en San Jacinto. Muchas denuncias y preocupaciones de las comunidades”, Remata Javier Pava Sánchez.
Esta es la realidad que será comunicada al Gobierno entrante de Gustavo Petro-Francia Márquez, dentro de los resultados del empalme social de esta rica pero abandonada región de La Mojana.
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