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JARAQUIEL: UNA LUCHA SOCIAL


Foto: Hoy, este panorama fotográfico, donde se marca etapas de espacios en tiempos vividos, en un pedazo de tierra surcada por los barrancos ribereños, la encantadora y mítica “Ciénaga”, sitio de encantos, pasiones y sustos, no es volver a “las Guerras del Sinú”. Es el lugar apartado de la urbe capitalina, embrujado y circundado por serranías y aguas corriendo lentas de aquel caudaloso Río Sinú. Pueblo de “indios ZENÚ”. El Gran “Xaraquiel”- Ubicado entre el Río y la Ciénaga. 

 

“Xara” y “Ezequiel”, mujer y hombre, casados por el rey natural, testimoniados por la creencia del ser prehispánico. Dos primitivos que sú único “Dios” era el Sol y el Río. Ahora, otras generaciones humanas amalgaman la historia aún no contada de la muchedumbre de siglos. Es, el Cabildo Xaraquiel  administrado por gentes de armas tomar, dentro de la nueva lucha que logre encontrar la redención del DESARROLLO SOCIAL. 


Crónica 1ª: Hugo Miguel Buelvas Posada: Director MILENIO 2024 

 

 

Siglo tras siglo, generaciones, tiempos, espacios, civilizaciones y culturas; son los gigantescos pasos entre seres humanos y la naturaleza, refrendados en una población soliendo dar vueltas a series de almanaques y calendarios, tras diversas épocas registradas en historias hasta conocerse y explicarse dentro de la sociedad actual, en atención al conglomerado social denominado JARAQUIEL. 

 

A distancias largas y cortas, el panorama poblano nos inclina divisar disparidades geográficas de la cuenca Sinú, en que, las aguas y los paisajes naturales, enamoran y cautivan enseñanzas. Proponiendo a su gente, convivir en comunidades mestizas, pero arraigadas al socio cultural ZENÚ.  

 

Cabildo “Xaraquiel” nacido  de la unión familiar “Xara- Ezequiel”, dos caciques untados del mismo suelo fresco, remojado por las aguas del Río Sinú y de la otrora ciénaga del mismo nombre. Hoy por borrarse. Logrando engendrar la raza prehispánica del Zenú primitivo, surgiendo de la nada, pero de esencial creencia y costumbre aborigen, arrojando en la presente época otros contubernios o contertulios en pro de exhibir nuevos espacios hacia la sociedad humana “ultramoderna”. 

 

Tales modismos,  guardan mixturas de identidad cultural, en donde el hoy habitante amontonado del pueblo Jaraquiel, expresa generosidad y confianza, entre el palpitar emanado de su voz, habla y costumbrismo coloquial. Por ello, los días 21 y 22 del presente marzo de 2024, el inmenso caserío ubicado sobre las riberas y barrancos densos del Valle Sinú; celebra el segundo “Reinado Indígena”. Evento matizado en realizar diversidad de espectáculos apropiados a revivir y mantener la idiosincrasia de la cultura y el folklore Zenú. Honor sagrado a IE- “San José de Jaraquiel”, dando 10 promociones de bachilleres, con ello, innumerables nativos formados en varias disciplinas académicas. 

 

La esencia del segundo reinado indígena Zenú- Jaraquiel 2024-  se manifiesta en muchos concursos de índole folklórico, como: “nado, zambullida, pesca en atarrayas, canotajes, cogida de peses y de aves acuáticas al aire, desfiles en canoas y  Johnson a través de las aguas del río Sinú”. Comidas típicas, entre ellas: arroz de cerdo, en sopas, frito, sancocho de pescao,  dulces variados en especies, tales: tortas de ñame, de papaya, ahuyama, mote e queso revuelto con bleo, arroz colorao, entre otros de los sabores.  

El “jaraquielero” de hoy, su principal devoción consiste en el  medioambiente, mostrar  su decidida defensa y conservacón. Costumbres encontradas en sus más  encopetados dirigentes cabildantes, como: Eterio Del Toro, hombre conversador y docente de modales cotidianos; Víctor Buelvas, Hernando Lugo, Claudeth Morientes (Alguacil Mayor)   y el Capitán Mayor,  Samuel Bohorquez.  

 

En esa misma cera de amantes a la cultura ancestral, hallamos las hermanas: Muñoz Buelvas, Gloria y Anadelfa. Además de un sinfín de habitantes, entre niños, adolescentes y jóvenes alistándose para no perderse de un solo acto festivo.  

 

Lo más trascendental en este momento, es sin dudas, el amor desbordado que mantiene la comunidad Zenú de Jaraquiel por hallar algún día, la puesta del desarrollo comunal o comunitario: la construcción del sistema de Alcantarillado Sanitario, pavimentación vial a la Brigada Militar, en  total de cinco kilometros, su Museo Arqueológico para la Memoria Histórica, Plaza Pública, estudios medioambientales a la ciénaga, intervención gubernamental, a  través del  Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), en lo tocando al lineado territorial tanto del complejo cenagoso  y el caserío Pueblo Palma, que de un  total de 20 hectáreas, el capitalismo terratenientes ha adquirido hasta el  78,67%.  

 
 
 

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