¿QUIÉNES SOMOS?: POSADA- SIBAJA- VIVENCIAS EN TIEMPOS Y ESPACIOS
- mileniolarevista
- 4 abr 2024
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HISTORIA DELOS PUEBLOS: LA RECOMPOSICIÓN DEL PASADO
Foto: Cuan agrado sentirse hoy, cinco siglos después, presenciar pedazos de rastrojos, entre pajonales y arboledas, señalados en la primera imagen. La segunda posa, ya sobre finales de 1800, la primera arquitectura de la “Parroquia San Emigdio”, seguido del lugar “Plaza Pública”, escenarios de cruentos combates registrados entre españoles y criollos, por donde fluyen otras gotas de sangre, consecuencias de “las Guerras” tanto de la Colonia, la Conquista y la Reconquista.
Debajo o la parte inferior, imágenes representativas actuales de los géneros familiares: Sibaja (Dominga Emilia), Posada- Madera diversas, una casucha antigua, finalizan dos integrantes Sibaja. (Fotos captadas la tarde del 10 de enero del presente año 2024. Simbolismos que denotan genealogía de la vecindad familiar de: Tambor, Santero y Santo Domingo.
CAPÍTULOS IV-V: Crónica 3ª: Autor: Hugo Miguel Buelvas Posada
Incluidos en el periodo de tiempo 500 años o cinco siglos, tras el “régimen del terror”, de la Reconquista: el principal objetivo presente, encierra diversidad cultural y costumbres de las últimas 15 décadas. Espacio territorial que, tras el abordaje inicial de Juan de Mata Posada y Santiago Sibaja, los tres sitios, aparecen confluidos por vivencias del “mestizaje criollo”. Sentido atinente a culturas locales y nacionalistas de valoración visibilizando tipo latinoamericano, muy diferente al colonialismo europeo.
Siglo y medio después, el estudio psicológico apegado a la sociología rural de los tres sitios, conjugan series de experiencias que la personalidad del mismo individuo habitante, introducido en su capacidad vivencial y el espacio de la situación, de la confluencia poblana, hacen convivir otros caracteres humanos expresados en familias, como: Velásquez, Pacheco, Aguilar, Banda, Madera, Pertuz, Bravo, Villalobos, Villadiego y Arrieta, esencialmente, predominan sobre el ámbito subregional, entre nativos locales y venidos de otras latitudes: San Onofre y Tolú, por ejemplo.
El sentido sociológico, relativo a las tres vecindades, no obstante aparecer culturizaciones familiares del pueblo Sitioviejo, conlleva vivenciar situaciones contempladas en “el arrendamiento de tierras improductivas”, incluso mucho antes de la Reconquista Española, época en que, el territorio Zenú- hoy municipio de Chimá, causó series de conflictividades, entre el nativo y colonos apoyados por reinados ibéricos.
Los rasgos familiares distribuidos sobre considerable área rural (Tambor- Santero- Santo Domingo), reflejan vivencias de teorías propias a mediados del siglo 18, al que algunos llamaban “Siglo Ilustrado”, pero de grandes fatalidades para los entonces primeros habitantes de la cuenca hidrográfica de Chimá. En la actualidad, los familiares asentados sobre los tres caseríos, vienen de las crecientes necesidades económicas del real erario y la transformación de la entonces población rural neogranadina en procura de abrir paso a una política desembocada en el proceso de los resguardos.
Dados aportes bibliográficos y tradición oral, escarbados desde largos años, al tener uso de razón, compenetrarnos con el vecino y familiar de la zona; hay indicios de personas ascendentes de España, pero poseedoras del consabido “mayorazgo” obtener un provecho de la tierra, sin ser poseída directamente. Creyendo posible, alrededor de 80 años de creado el Resguardo Zenú, mediante cédula de la Corona de Castilla, otorgando 83 mil hectáreas al pueblo primitivo; factible la aparición de “Juana Romero” y “Cleto Ibáñez”, hayan sido usurpadores de grandes extensiones de tierras en la subregión Tambor, Santero, Santo Domingo, hasta colindar con Momil, Sabaneta y sitios toludeños.
Nada de extrañeza, el “mayorazgo” de Juana Romero, haya tenido relaciones de modo habitual de obtener provechos de la “Tierra Profana”, dentro del Reino de Granada, tras arrendar territorios a indígenas, bien pudo arrematar bienes aunque declarados “vacantes” a favor de la vecindad poblana de entonces. La apodada “Juana Dama de Hierro”, fue beneficiaria de miles de cabezas de ganados, donde adulta mayor, suele refugiarse en el sitio “Presidio”, al parecer, en el que fallece, pero sin saberse aún este 2024, el destino de sus últimas fortunas económicas.
Juana Romero: “Dama de Hierro”, pese su apellido originario español, en los registros históricos “Cartagena de Indias”, podría referirse a una persona popular, aunque amparada por reinados europeos. Pero si dada a formas de acceso a la propiedad, mediante la expropiación y el mayorazgo reglamentado en la ruta relacionada con “las Mercedes” (ventas y composiciones de bienes realengos, sitios y baldíos). “Realengos”: dichos de un pueblo, que no era de señorío ni de las órdenes y “Mercedes”: dádiva a gracia de empleos o dignidades.
El arrendamiento puede considerarse un modo habitual de obtener un provecho de la tierra que no se posee directamente. En el Nuevo Reino de Granada, la presión que ejerció el campesinado no indio por la vía del arrendamiento de las tierras de los resguardos desembocará en un proceso irreversible de extinción y agregación de pueblos de indios y en el remate de las tierras declaradas "vacantes" a favor de los vecinos. Otras formas de acceso a la propiedad mucho menos frecuentes fueron la expropiación y el mayorazgo que reglamentó el camino por seguir con relación a "las mercedes, ventas y composiciones de bienes realengos, sitios y baldíos" hechos hasta el momento y que se hicieran en adelante.
De sobreentender, tiempos antes de la Reconquista Española, grande extensiones de terrenos que, actualmente conforman el área municipal de Chimá, eran unas “Encomiendas”, territorio llamado “San Pedro Apóstol de Pinchorroy”, pudiendo relacionarse el mismo siglo 16. Mucho antes de las refundaciones hechas por Torrezar Díaz Pimienta y De la Torre y Miranda; sin embargo, el pueblo hoy, solo idolatra el paso del último español. Situación a la que se sumaba el aumento del pequeño campesinado, blanco, mestizo o mulato.
Aunque culturalmente, entre una u otra familia tenga costumbres comunes, las identidades en sus prácticas disciplinarias exhiben otras similitudes, sea en lo social, económico, cultural, político y religioso. Entonces, la variante familiar de la trilogía territorial, tras su descendencia étnica involucrada en la sociedad colonial, “blanca, negra e india”, suele identificarse “Criolla”. (Estudios investigativos de campos).
Entre tanto, marcados 150 años de vivencias poblanas criollas, es de percibirse familiares enfrentamiento de situaciones en las cinco generaciones humanas, que, arrojan positivismo y negativismo. Ello expresa manifestaciones correlacionadas impactantes a los mundos vividos. Ejemplo, estudiado y analizado “durante últimos 55 años, siglos 20 y 21, palpamos, absorción de culturas, entre el mismo nativo habitante pueblerino. Son maneras o mundos diversos.
Dicho de modo conceptual, el nativo que salta a otras latitudes geográficas, distantes o intermedias, aporta aprendizaje de diferentes vivencias, en adquirir conocimientos, habilidades y valores que coadyuvan a enfrentar los desafíos de la vida. Siendo evidencias permisibles aprender de errores y creer otros modales como personas. Puesto, nada distinto, el poblano (tamborero, santerano o santodominguero, ido a otros sitios, sino, las razones de enseñanzas –aprendizajes.
Enero del presente 2024, nos hizo cavilar acuciosidades sociológicas, tras conocer y conversar con algunos: Sibaja- Posada, denotando importancias de vivencias, obteniendo conocimientos, habilidades y valores, casos de personas jóvenes, allegadas de lugares lejanos, enseñando otras clases y modos, cómo sentir las situaciones en primera instancia, dando a entender, la comprensión y la relación del conocimiento.
Asociar el hoy presente, con los cinco siglos de historias acaecidas en el territorio poblano Chimá, el “otro salto” dado desde la sociedad rural (Tambor- Santero- Santo Domingo), a niveles aún difíciles y desconocidos, de encontrar clases distintas de vivencias. Claro está, enseñando una lección importante que pueda modificar comportamientos.
Preguntamos, ¿qué visiona el tamborero o santerano, instruido académicamente, de vivencias distintas al otro o los otros de la misma tierra? Desde 2015 al 2024, nuestro trabajo investigativo de campo; permite fundamentar mayores conocimientos comunitarios, jugando papel importante hacia el logro de vivencia positiva, ayudar a los demás, siendo posible desarrollar una actitud altruista sentirse motivado el habitante andando shacia un futuro cerca, en vista de los recientes cambios estructurales del ambiente vivido.
El grueso cúmulo familiar concentrado en la zona citada; procura establecer que, tipos de vivencias no solo dependen de la situación en sí (el yo o lo individual), sino también de otros factores circunstanciales influyentes en la manera de percibirse e interpretar. Algunos de ellos influyen: La sensibilidad emocional: nuestra capacidad para experimentar y expresar emociones influyendo en la intensidad de nuestras vivencias. Entender, una persona con alta sensibilidad emocional puede experimentar vivencias más intensas y profundas.
Espere próximos capítulos: (¿Quiénes somos?- Sibaja –Posada- Berástegui, no Burgos) Historias de la Reconquista y el Virreinato.
Apoyo: Lina Montes Oyola- Domingo Ayala Espitia- Victonio Gómez- David Peña Gómez- Max Correa Noriega- Miguel Palomino Cantillo- Wilfrido Mendoza Romero – Félix Hoyos Lemus- Jesús María Estrella Tirado- Antonio Mora Vélez – Jairo Torres Oviedo (Universidad de Córdoba).
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