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CALLE Y LA AGRODINDUSTRIA: PARQUE DEL MAÍZ Y ALGODÓN


Foto: La secuencia fotográfica encierra todo el empeño proyectivo del candidato a la Gobernación de Córdoba 2024- 2027, GABRIEL ENRIQUE CALLE AGUAS, exhibiendo los componentes del ambicioso programa: “PARQUE DEL MAÍZ Y EL ALGODÓN- SINÚ MEDIO”, partiendo de premisas del cordobés labrador y desplazado de las posibilidades de ver sus tierras fértiles en una edad nueva de la producción agrícola.


La milenaria cultura ZENÚ mantiene vitalidad identitaria por sus vástagos ancestrales, principalmente en las cuencas hidrográficas Sinú y San Jorge, haciendo cubrir la totalidad territorial de la geografía departamental cordobesa.

Cualquier evento manifestado en bailes, costumbres, sociologías, geopolíticas, historias, danzas, música, poesía, cantos, cuentos y demás narraciones literarias; podrían 21 siglos después, reemplazar la fertilidad del suelo de aquel “Gran Zenú”; representado en el individuo de “Agua y Tierra”. Razón por la cual, “el Maíz”, producto esencial de tal significativa cultura anfibia, hoy, por ejemplo, merece ser tenida muy en cuenta.

“Parque del Maíz y el Algodón”, constituyen ambos espacios culturales antiguos, traídos y regresados al presente hacia el futuro de solo una porción de tierra, aunque, bastión generador para una “agroindustria” regional, nacional y expandida al extranjero.

“Parque del Maíz y el Algodón” del Medio Sinú o Sinú Medio, proyecto similar al “parque del Eje Cafetero”, solo con diferenciaciones de cultivos; hace parte de la copiosa agenda programática de GABRIEL CALLE AGUAS, único candidato a la Gobernación de Córdoba, ubicando tal proyección política sobre la geografía más enraizada de la Era Agroindustrial del departamento; área municipal de Cereté, en calidad de eje preferencial históricamente.

Calle Aguas, procura con el citado proyecto, abarcar gran extensión territorial, también de los municipios vecinos: San Carlos, Ciénaga de Oro y Chimá, fines específicos incentivar el retorno del labriego a sus tierras pertenecientes a las comunidades aborígenes de la prehistoria. Pues entonces, la otra humanidad que administrabas sus tierras con el cultivo del maíz. Principal objetivo, “no regresar a la importación de maíz oriental por millares de toneladas a la vasta subregión del Sinú Medio”.

“Parque del Maíz y el Algodón”, busca igualmente involucrar al artesano agrícola desterrado año tras año por el rigor capitalista. Donde no sea el “adinerado” solo quien ostente las riquezas de cultivar ambos productos. Por ello, la campaña Calle Aguas, cuenta con un acertado censo del número de campesinos de la zona en mención. De hecho, se aprovechará el flujo turístico demandado por el Aeropuerto Los Garzones, para lo relacionado con la campaña exportadora de fuentes productivas de empresas industrializadoras mediante la variación de maíz y algodón. En esencia, ahí radica la importancia del proyecto Calle Aguas.


TERRITORIEDAD

Los cuatro municipios incluidos en el programa, Cereté, San Carlos, Ciénaga de Oro y Chimá, partes de la hoya del Sinú Medio y Ciénaga Grande, contabilizan la totalidad de 224 mil 60 habitantes. Ellos, asentados en un total de 161 mil 680 hectáreas.

Algo preocupante, el transcurrir de siglos, aún los 71 años cordobeses, grandes daños ocasionados en la territoriedad, focalizando ahora, un numero ruin de solo 38.111 hectáreas aptas para la agricultura, con más del siglo de problemática agraria, situación agravada en los 35 últimos ciclos dado el barbarismo capitalista.


Foto: Rastros del otrora emblemático “Caño Bugre” de la también Cereté “potencia” agroindustrial. Todo por los “desgobiernos locales y departamentales”.

Cereté, de sus 27.880 hectáreas, mantiene 16 mil 18 en la actividad agrícola, aceptable contra 10 mil 753 en ganadería, con el 0,8% en humedales. Entre tanto, San Carlos, región con baldíos cogido por la fuerza, tal Alvaro Uribe Vélez, aparece con, el 87,88% del territorio abarcado por haciendas ganaderas de unas 50.200 hectáreas. Donde la agricultura no ha tenido oportunidad de cultivar una mata de maíz siquiera.

Chimá, con 33.500 hectáreas, su 74,68% es territorio agua, entre ciénaga, subcienagas y microcuencas. Quedando solo el 28,38% apto para labores agrícolas. Decir entonces, en ese municipio, alrededor de 168 campesinos autóctonos carece de tierras donde cultivar. Este entonces, permea el panorama social agrario del eje municipal subregión Sinú Medio.

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