La sola palabra “defenestrar”, encierra serie de connotaciones lingüísticas conduciendo también diversas épocas geopolíticas, sociológicas, culturales y de historias de siglos atrás, compenetrando igualmente el ámbito Burgués. Sencillo de entender: en Colombia cuyo término, aparece enseñoreado en la clase social, las personas acomodadas y con grandes propiedades capitalistas.
La “tóxica” expresión de un militar en retiro, a voz viva y pública en “defenestrar al presidente Petro”, no es suya. Prácticamente su origen provenga de los llamados “burgueses” asolapados en linajes de familias presidenciales, por lógica, el pueblo sabe y conoce perfectamente.
La defenestración es el acto de arrojar a una persona por una ventana. Pese su procedencia latina (‘de desde), y fenestra )’ventana), interesante traer a colación como ejemplo, un grabado exhibido en la antigua Praga en 1619, connotando hechos políticos dirigiéndose hacia individuos con altos cargos. Así de manera figurada el cobarde hecho y de desequilibrios psíquicos significa la destrucción o expulsión de alguien de su cargo o puesto.
El término “burgués”, lo usamos dado los hechos milenarios de Praga, ciudad surgida durante la Edad Media conocida “la cabeza del reino”. De manera histórica el acto de “defenestración” en la antigua Praga, cometido por los burgueses sus principales objetivos era tipo políticos. Casos reales, demuestran el asesinato de la reina Jezabela a través del mismo método que, la tal “Derecha colombiana” pregona ensayar contra Petro. Si allá en la capital checa, el crimen fue ordenado por el Rey Jehú, acá, cuántos infiltrados en las serían los propulsores.
Mientras en Praga, hoy en este siglo 21, exhibiendo otras características urbanas; la tercera defenestración es considerada el detonador de la Guerra de los Treinta Años. En nuestra patria, los ahora herederos de las múltiples guerras civiles y toda una serie de conflictos armados, es importante afirmar, su tiranía se mantiene intacta. Conveniente mencionar las guerras civiles acaecidas en el territorio colombiano:
Las guerras civiles, se debieron a una serie de conflictos internos durante el siglo 19, Si es el caso, descontarse las revueltas internas de los Estados federales, siendo las refriegas entre ellos, en 1812 y 1886 (Estados granadino y la alianza nacionalista de Nuñez). Lapso en que el país sufrió nueve guerras civiles de estirpe general. Habiendo otras menores de carácter regional y múltiples revueltas.
Terminando con la de “Mil Días”, en la República de Colombia se han realizado un total de 54 guerras civiles, 14 de conservadores contra liberales, dos de liberales contra conservadores y 38 de liberales contra liberales.
El daño antidemocrático de la expresión:” defenestrar”, también se da en la restauración de la independencia de Portugal, año 1640 bajo la dinastía Filipina penetran al palacio de Lisboa sorprendiendo a Miguel de Vasconcelos, al servicio de Felipe IV de España, quien trata de ocultarse sobre un armario sin éxito, para terminar siendo defenestrado por la fachada del Palacio Real.
De otra parte, sesenta y un año atrás, la emblemática Puerta del Sol de Madrid, fue el lugar donde el político Julián Grimau es defenestrado, tras ser jalado al patio interior de la sede de la Dirección General de Seguridad, para encubrir las torturas que había sido sometido por la policía franquista,
Acá en Colombia, desde los partidos tradicionales, escuderos perversos del capitalismo nacional, antes que fomentar desarrollo humano, tercian a otros lados en contra al modelo reformista estatal.
Hoy en día, Alvaro Uribe Vélez, Andrés Pastrana Arango, César Gaviria y Germán Vargas Lleras, suelen estar retrocediendo las vividas épocas de las 54 guerras civiles. Siendo ambiciones por verse en la guerra solo para conquistar el poder y retenerlo (queriendo destronar el presente).
EL PUEBLO: LA ÚLTIMA PALABRA
Tiene el pueblo colombiano hoy, un cimentado Plan Nacional de Desarrollo (PND), concebido por las masas humanas en los 28 diálogos vinculantes cumplidos en el territorio patrio, y que el gobierno al recopilar toda la información postulada por las comunidades diseñó los nuevos esquemas normativos, por los que así mismo, se “refunda o se reorganiza el Estado”.
Falta aún, reformar la justicia, comenzando por la Procuraduría y la Fiscalía, y por ende, el político. El sistema de educación ya bastante desgastado. El periodismo o la prensa. Incluso el ejecutivo, donde los cuatro juntos: con la prensa, ameritan de profundos cambios. Temas o asuntos de mucha mesura y análisis requeridos de profundidades en que, la ciudadanía se apersone de sí misma en su comprensión con fines de dar aprobaciones al respecto.
Los grandes retos estatales están en el marco del PND, referente a la salud, el empleo digno, sendas reformas y por tanto la defensa al Medio Ambiente y la mitigación al complejo y dañino Cambio Climático, en donde se encuentra los efectos de Hidrocarburos, involucrada la deuda interna, asunto nocivo acuñado al escenario internacional de tasas elevadas, sumamente imposibles para el país en las actuales circunstancias socioeconómicas, según consideran expertos en análisis sociopolíticos.
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