Aunque dos eventos por la entregas mayores de 11 mil hectáreas de tierras a campesinos del Magdalena y Córdoba, propiciados a través del Presidente GUSTAVO PETRO URREGO; el Consejo Editorial MILENIO, solo seleccionó el apoteósico apoyo y respaldo popular brindado en la ciudad de Montería.
Siendo alrededor de 4.885 ciudadanos cordobeses apostados en las afueras e interior del Coliseo deportivo Miguel Happy Lora, brindaron total confianza al Gobierno del Cambio. De paso solidarizarse con las víctimas del conflicto armado, pese el perdón hecho por Salvatore Mancuso, excomandante de las AUC de manera pública, en que, la muchedumbre más bien guardó silencio.
CRÓNICA: HUGO MIGUEL BUELVAS POSADA: DIRECTOR REVISTA MILENIO 2024
Jueves tres de octubre de 2024, marca un día histórico para los Departamentos de Magdalena y Córdoba. Constituye el inicio del proceso de 40 mil hectáreas que se entregan al campesinado nacional de Colombia. Alrededor de 11 mil en ambos territorios del Caribe. Siguiendo el complejo camino de la Paz, a través del gobierno progresista del Presidente GUSTAVO PETRO URREGO.
El suelo fértil de los municipios de; San Sebastián de Buenavista, San Senón, Pinillos y Santa Ana (Magdalena) y, Buenavista (Córdoba), son entre sí, la misma riqueza productiva de alimentos anhelada por la humanidad del Litoral Caribe. En torno a la entrega de tierras: más de 3.280 hectáreas en jurisdicción del Magdalena, terrenos pertenecientes a la Universidad de Antioquia. Mientras las ocho mil 430 de Buenavista (Córdoba), cuyos últimos propietarios eran los narcotraficantes, Salvatore Mancuso, alias “Macaco”, “Jorge 40”, “Nico” y “Cuco Valoy”.
De esa cantidad de hectareaje en el área departamental cordobés, los jefes paramilitares se adueñaron por año de 7.916 hectáreas. Terreno que por competencia jurisdiccional de la ley de la nación, pasa automáticamente a las familias víctimas del conflicto armado.
El Presidente Petro, durante dos intensas sesiones cumplidas este jueves tres de octubre; la primera en San Sebastián de Buenavista (Magdalena), población de 20 mil habitantes, con una distancia de 315 kilómetros de Santa Marta. Pueblo igual que los demás de luchas sangrientas por la Tierra. Aquí, donde hoy, el Presidente Petro, honró la memoria del joven Milton, líder asesinado e hijo de Zenaida; recibiendo fuerte abrazo del Jefe de Estado y aplaudida por el público asistente.
Petro acompañado por Felipe Harman, Director General de la Agencia Nacional de Tierras – ANT- endureció sus palabras en ambos sitios caribeños, refriéndose a la trascendencia del habitante humano del campo, donde caso de San Sebastián de Buenavista, han sido décadas de años batallando por construir la cadena alimentaria. Entre tanto, el conflicto social agrario de Buenavista Córdoba, el terreno despojado a los paramilitares se hallaba en manos de un concejal del área municipal.
En la misma caravana por el alargue de la Reforma Agraria, mediante la entrega de 40 mil hectáreas este mes de octubre, también estuvieron, el Fondo de Reparación de Victimas y la Sociedad de Activos Especiales (SAE).
Pasado el mediodía, Petro presidió el ceremonial magdalenense desde predios lagunares de la vereda El Recreo del municipio de San Sebastián de Buenavista (Magdalena). Acto en que grupo de danzas ejecutó aires bailables del Chandé. Mismo territorio donde parecía una autopia, liderada por el activista social Néstor Armesto Echavez (Pacho Julio). Quien en asocio de decenas de campesinos decidieron tomarse los predios de la finca Santa María en el corregimiento de San Valentín, municipio de San Sebastián de Buenavista.
Puesto tener el final con la entrega oficial de tierras para el campesinado en manos del Presidente Gustavo Petro.
Este mismo jueves tres de octubre, en las instalaciones del coliseo de deportes, Miguel Happy Lora de Montería, el show lo pusieron, Gustavo Petro y Salvatore Mancuso. El segundo, ya despojado de las tierras destronadas a millares de campesinos, se confesó en público, pidiendo perdón por todas las barbaries hechas contra la humanidad campesina del Departamento de Córdoba.
Destacarse al mismo tiempo, la interpretación musical de porro, por el instrumental de la Banda de Viento Laguneta, bajo la dirección de Miguel Emiro Naranjo Montes. Momentos del guapurreo sinuano, en que, aparece vivar la otra cultura caribeña; en el solo día, jueves tres de octubre.
Al interior del complejo renovado coliseo, tras la carcomida corrupción de la godaria criolla; el pueblo ardido por las injusticias, pese callar a la intervención del excomandante Mancuso; alzaba los brazos y entonaba cánticos de apoyo a la gestión Petro. Un interior atestado del gentío rebelde ante las guerras, las violencias, las masacres, las barbaries. Pues entonces, los suelos magdalenenses, los del Sinú y el San Jorge, hoy son testigos de la historia de “los huesos”.
Gustavo Petro Urrego, caracterizado orador pensante, de una estructurada lingüística coloquial, luciendo el típico sombrero de vueltas, pregonaba historiales del hombre común cordobés, sin tener las oportunidades por sembrar un trozo de tierra dado el temor por la muerte.
Ejemplarizaba aspectos del vividos en el viejo mundo, amalgamado al enriquecimiento por la acción de las armas y el poder capitalista. Afirmando de paso, ser este día jueves 3, el comienzo para la redención del ambiente natural de cómo volver a cultivar la tierra cordobesa. Razón lógica en democratizar la auténtica Reforma Agraria por la Paz.
Su alocución se acomodaba al destino de consolidación por una democracia bordeada con el acuerdo nacionalista. De no volver a mirar los pasados oscuros. Al contrario, sembrar confianza e igualdad de condiciones humanas. Claro está, aun poniendo en dudas cualquier progreso y desarrollo del Departamento de Córdoba, sin antes, existir una sociedad y sus gobiernos ayuntados al emprendimiento social.
Gustavo Petro, hablando cerca de Salvatore Mancuso, donde el excomandante de las AUC, le miraba fijamente, le cantó la tabla: “Lo nombré Gestor de Paz, para lograr llegar a la conciliación requerida entre todos.
En tono enfático, el Jefe de Estado, se refirió al complejo caudal del Río Sinú, comparándolo con otros del país, afirmando, hay necesidad de ayudarlo a sobrevivir. En ese mismo orden de ideas, volvió a tocar el conflicto de la Tierra y el Agua en su departamento, preguntarse, por qué matarnos los unos y los otros,
Premisa ésta encaminada a la permanente guerra por el poder de la naturaleza, respecto la Tierra y el Agua, razones obvias en la generación del conflicto armado, subrayó el Presidente Gustavo Petro. Especialmente, jueves tres de octubre en que, el pueblo departamental de Córdoba, mostró con aprecio y afecto su apoyo y respaldo a la generosa gestión de gobierno.
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