Foto: Evidencias de encuentros que, cosecharon amistades y excelentes recuerdos, siendo hoy claros ejemplos de la historia nacional colombiana. La vida de un reportero en las rutas democráticas.
Crónica: Hugo Miguel Buelvas Posada: Director MILENIO 2024
La suspicacia o la picardía que, un “reportero libre”, encierra en su posición de “Periodista”, sea trabajador de alguna cadena radial o de un periódico. De cómo pararse o situarse, frente a la ocurrencia de un hecho, digamos de importancia, con el efecto fundamental de llevar al sitio de la mesa de redacción, para presentar y publicar ante un conglomerado social. Por demás de todo, depende de poseer conocimientos, confiabilidad y autonomía en el dominio de sus temáticas.
“El cara a cara”, entre protagonistas y el reportero, pareciera en este mes de marzo año 2024, un papel de novelas. Es decir, algo no real de cualquier acontecimiento. Pero, la verdad dicha, son espacios de la “historia vivida del periodismo”. Captar las distintas versiones, un poco de hipótesis, guardarlas tanto en la mente como en una libreta de apuntes o en una grabadora.
La razón de la lógica, estos hechos por cierto dados en modas, tiempos y modos diversos, sucedieron, incluso hasta la primera década del siglo actual o sea el 21.
Para muchos lectores hoy del Blog Digital Revista MILENIO, antes, sí, años atrás, escribíamos de otras formas o maneras. Lo hacíamos tanto para Radio en cadenas o Periódicos, donde éramos trabajadores empleados. Sometidos a un régimen codificado, hasta llegar a perderse toda capacidad pensante. No obstante, aclarar ahora: En Todelar, Caracol y diario El Universal (décadas 70 a 90), inclusive, el periodismo se manejaba de otras maneras, más suelto con algo de libertad. Pasando también por el otrora Diario del Caribe.
Fueron criterios que nos daban oportunidades de escribir nuestros propios criterios. Sabiendo y conocer de hecho, existir normas vigentes de Legislación de Prensa colombiana. Hoy por ejemplo, quien desee, se jacta decir: “Soy Periodista”.
A este marzo 2024, nos toca decir algunas verdades, hasta conservadas ocultas. Comencemos con: Juan Manuel Santos Calderón. Mucho antes de un ameno encuentro en un lugar apartado del entonces “Club Campestre”, barrió El Recreo, laborando para diario El Heraldo, siendo jefe de campaña de Ernesto Samper Pizano, candidato a la Presidencia de la República, en común nos soltó varias noticias, pues, solo publicando cuantos párrafos.
Entre las cosas tramadas, estaban: “lanzarse a Presidente de Colombia, entonces por el Partido Liberal, jamás por su mente tenía a Uribe, menos lo de “la U”. Como tampoco llegar a ser su ministro de Estado.
Juan Manuel, sí tenía claro, tratar en su programa de gobierno, asuntos especiales sobre la Paz en Colombia, hasta exterminar la guerrilla de las Farc por la vía militar mediante el uso de las armas. Vean que prácticamente la termina a través de dialogo de paz. Aunque, lo del “premio Nobel” fuese un segundo episodio. Así como la reelección presidencial.
El encuentro casi que escondido con Santos Calderón, el entonces muchacho barbado y reportero entrépito del diario El Tiempo, ligado con las guerrillas populares o barriales de la Bogotá más fría que ahora; contó con la presencia del extinto, Héctor Augusto Lorduy Rodríguez. ¿Qué sucedió en el encuentro?
“Tanto Santos y Lorduy, soltaron la chiva, algún momento de la historia política nacional colombiana, se encontrarán: Juan Manuel Santos y Gustavo Petro, sobre el álgido tema de la “Guerra y la Paz”. Yendo más profundo, Lorduy, en repetir: Gustavo Petro, será presidente de Colombia”.
Y, saltando donde Gustavo Petro Urrego, hasta hace poco, le surtíamos de “cositas programáticas”, alimentando sus discursos durante las veces llegado al Departamento de Córdoba, las ocasiones de aspirante presidencial. Ratos anteriores, a las dos últimas candidaturas, en pleno suelo húmedo del aeropuerto Los Garzones, tocamos el tema medioambiental, hasta sostener una discusión pedagógica.
Foto: Dos personas amigas en común: Gustavo Petro Urrego, actual Presidente de Colombia, guardando nuestra ética, dejarle libre su acción de gobierno, cuestionar si es posible. Con Darío Arismendi Posada, es un periodista de persona dócil, donde muchos podrían equivocarse.
Hoy, a sus dos años de mandato, es de recordarle: “bastante agradecido por su novedoso Plan de Desarrollo Nacional –PDN- 2023-2026, habernos incluido nuestra propuesta medioambiental relativa al Dragado del Río Sinú, un rubro económico en dicho eje temático del nivel nacional de cuatro años por 28 Billones de pesos. Desafortunadamente, las administraciones tanto del gobernador como la de los 15 alcaldes municipales de la Cuenca Hidrográfica del Sinú, son “neófitas” en todos los niveles.
En una primera crónica publicada “Ruin Desarrollo de Córdoba: 72 años”, enumeramos los primeros proyectos productivos diseñados por el Gobierno Petro en el PDN 2023-2026, faltando otros más, que saldrán en el informe segundo, para un total de alrededor 16 proyectos, teniendo recursos económicos financiados de grandes cuantías millonarias. Entre ellos, aparece, la “Universidad del San Jorge”.
Enfatizar sobre este: Primero: Ordenamiento del territorio alrededor del agua y justicia ambiental Otras transformaciones: Transformación productiva, internacionalización y acción climática.
En este “eje temático”, aparecen proyectos competitivos de los 30 alcaldes, primeramente preguntar el número de basuras generadoras de contaminación ambiental. Montería, ciudad capital, cabecera principal, posible “Municipio Núcleo” o “Metrópolis”, por Área Metropolitana, ávido de un sistema moderno de acueducto y alcantarillado de aguas llovidas. En sus 101 años de caracterización municipal, no ha tenido “política de aprovechamiento de residuos sólidos- caso especial, “programa Basura Cero”.
Razonable, entender las subdivisiones de seguidores “Pacto Histórico” o de “Colombia Humana”, a nivel del Departamento de Córdoba, en donde no existe unidad de fuerza hacia cualquier liderazgo. “Todo el mundo jala para sí mismo”. Algo grave, en el fondo, de cual casta allegada al petrismo, existe corrupción. El hoy presidente Petro, pese mantenerse hoy (marzo 2024, con el apoyo político electoral sobre el 86,54%), debe realizar una limpieza desde las llamadas cúspides.
Mientras que, en relación con el jurista, ex fiscal, ex procurador, ex congresista y ex embajador, Alfonso Gómez Méndez, con quien compartimos tertulia en la Biblioteca Nacional, en un acto de premiación del Concurso de Periodismo Nacional Simón Bolívar (de los dos recibidos), hoy hemos sabido tener aspiraciones a la Presidencia de la República, aunque liberal, lo haría cercano al gobierno Petro. Las relaciones han seguido mantenidas con el político tolimense.
En cuanto a Darío Arismendi Posada, en otro acto similar, también ganador de un premio nacional Simón Bolívar, conversamos largos en virtud del manejo actual de la prensa colombiana de las últimas décadas.
Kommentare